Los tiempos de espera en la carga y descarga influye en los productos transportados cuando del transporte frigorífico se trata. En este, mantener la cadena de frío es esencial. Uno de los puntos más críticos para mantener la calidad de los productos refrigerados es el tiempo que pasan durante la carga y descarga. Aunque este momento no parece demasiado importante, es este el que puede marcar la diferencia entre una mercancía bien conservada, con todas sus propiedades y otra que las ha perdido. Te cuento a continuación los riesgos y efectos que pueden darse en los tiempos de espera y cómo evitar los eventuales problemas.
Riesgos que existen durante los tiempos de esperas
Cada minuto cuenta y este tiempo es fundamental porque, cuando un producto refrigerado permanece fuera del rango térmico que se recomienda, sus propiedades y su frescura se pueden ver afectadas. Sus efectos negativos son:
- El producto pierde su frescura y textura, sobre todo, aquellos alimentos que se consideran perecederos.
- Se multiplican las bacterias cuando quedan en rangos de temperatura críticos, es decir, entre 5°C y 15°C.
- Se pierden las propiedades nutricionales en alimentos como pescados, mariscos, lácteos y vegetales.
- Corremos el riesgo de que la mercancía sea rechazada en destino por incumplir la normativa de seguridad alimentaria.
Además de todo lo anterior, el vehículo frigorífico se ve afectado de manera negativa cuando se abren durante mucho tiempo las puertas. Esto es así porque durante este tiempo, los sistemas de refrigeración deben trabajar más.
Cómo optimizar los procesos y evitar estos problemas
Para poder garantizar que los productos transportados conserven su calidad de origen hasta que son entregados en destino, se debe tener en cuenta los siguientes factores.
Llevar a cabo una adecuada planificación de horarios
Es importante una buena coordinación con los almacenes, lonjas, supermercados o centros logísticos de tal modo que los conductores lleguen a las ventanas de carga/descarga de manera organizada para evitar esperas innecesarias.
Realizar un preenfriado de la caja frigorífica
Antes de comenzar la carga de los productos, es conveniente asegurarse de que el vehículo se encuentra con la temperatura adecuada a la carga. Con esto se evita el choque térmico cuando introducimos nuestra mercancía.
Realizar los procedimientos rápida y ordenadamente
Lo ideal es tener toda nuestra mercancía ordenada antes de proceder a la apertura de la caja. No hay que olvidar tener preparada la documentación y que el personal esté listo. De esta manera la puerta permanecerá abierta solo el tiempo necesario.
Controlar que la temperatura sea constante
Mantener la temperatura y no romper la cadena de frío es esencial por ello se debe contar con dispositivos de medición continuo. De este modo se puede demostrar en destino que no se ha roto a lo largo del trayecto.
Que el personal cuente con formación específica
Los conductores y los operarios de almacén han de tener la formación necesaria y comprender que los tiempos son esenciales y que si no se respetan, la calidad de los productos se ve comprometida. Por ejemplo, es importante que conozcan que en verano, cada 5 minutos que las puertas de una caja frigorífica permanecen abiertas, la temperatura interna puede aumentar entre 2 °C y 4 °C, según la carga y las condiciones externas. Un riesgo evitable si se mejora la operativa.
Gestionar adecuadamente los tiempos de carga y descarga no solo resguarda la mercancía y la imagen de la empresa, sino que también evita pérdidas económicas. Además, con ello estamos cumpliendo con la normativa vigente. En Transportes Frigoríficos Nazarenos lo sabemos bien: cada minuto es muy importante.
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